Erin Moyer es voluntaria canadiense que está acompañándonos por 2 años entre 2022 y 2024. Ella escribió esta reflexión en junio 2022 después solo algunos meses con nosotros.
Cuando empecé mi trabajo en la Fundación Comunidad y Axión (FCA) en El Alto, Bolivia, en abril del 2022, pensé que el trabajo que hace con los huertos familiares y con los jóvenes era importante para mejorar la seguridad alimentaria y la salud, ayudar el medioambiente y que ayuda a crear un mundo más pacífico.
Es evidente que estos temas son claves y muy importantes para el trabajo de FCA, pero del trabajo de FCA, además, se conecta con otros aspectos importantes y claves. Por ejemplo, los huertos familiares mejoran las relaciones de género, empoderan a las mujeres, mejoran la situación económica de las familias, mejoran la biodiversidad en la ciudad y promueven el cuidado de la Madre Tierra. FCA tiene claramente un horizonte definido de su trabajo y los impactos de los proyectos van más allá de sólo promover la seguridad alimentaria y la salud.
Un claro ejemplo de esta práctica es que los y las participantes de los proyectos de huertas familiares son alentadas a consumir sus propios productos, a compartirlos con sus familias y no a venderlos en el mercado.
Me sorprende el resultado, pues la mayoría de las familias mejoran su situación economía, no por vender, sino por consumir y compartir. Sus familias comen más verduras orgánicas y tienen una alimentación más saludable.
Si alguien me hubiese preguntado, antes de empezar mi trabajo con FCA, si las familias mejoran su economía familiar sin vender las verduras, con seguridad hubiese respondido que NO. Sin embargo, soy testigo porque vi y escuché que es la verdad. Muchas familias mejoran su economía familiar, aun cuando muchas familias regalan, comparten, sus verduras con sus vecinos y familiares.
Este impacto es real porque el trabajo de la FCA lo hace posible. Porque la FCA no es sólo está preocupada por la economía de la familia, sino también por la salud, la alimentación, por las dinámicas familiares y, en general, por una vida justa y buena. Con este horizonte, la FCA no sólo está preocupada por un sólo aspecto de la agricultura urbana, sino que también está abierta a los impactos conectados a la seguridad alimentaria, la salud, al cuidado de la Madre Tierra y al cuidado de toda forma de vida.
Comentários